Siempre perseguimos un sueño
cuando escribimos… y cuando no, ¿qué hacemos?. Como novios encandilados por la
fragancia del clavel; cante, patios cordobeses de humildes tiestos repintados;
rojos, verdes, blancos, llenos de poesía.
Pétalos de aire que se pavonean
ebrios de aguardiente y embrujo; quédate toda la noche. Deja que la aurora se haga la remolona mientras un beso graba la
fugacidad del instante; pena que nos
avisa, ya somos jueves.
Volveremos a eso que siempre
falta, lo que da no sé qué, lo que hace saltar sin miedos. Mirarse y encandilar
al universo … Somos capaces de
atormentarnos por una mirada de pasión y entregarse por lo que nadie apostaría.
Y si caemos malheridos buscaremos en el trino del ruiseñor el olvido, refugio
para el corazón.
Puertas que siempre estáis por
abrir. Colores que no èxisten… todavía. Besos que soñé y no te pude dar. Miedos
que no me dejaron vivir.
Buscad el aire del sur, veleta emocional; cuando
elijamos el camino será porque ya
tenemos el mal de amores. El mejor. Estamos perdíos.
Más dolores emocionales en casa de Lucía
Más dolores emocionales en casa de Lucía
14 comentarios:
Hay que dolor más grande, ese mal de amores que no deja nada quieto y ni en pié. Por lo bonito que lo cuentas, un paseo por esos patios cordobeses.
Un abrazo y un quejío.
Somos tan simples y tan complicados a la vez... ¡Qué dolor!
Mal de amores: quizás el que más duele.
un abrazo
Para el mal de amores no hay remedio en la farmacia :)
Bss.
Tu cantar.... se hace poesía, flor, veleta y vuela y llega al corazón.
Tu cantar... porque vos no escribís: VOS CANTAS LETRAS!!!
un fuerte abrazo
He leído caso todas las entradas sobre este tema juevero y esa triste melancolía de la emoción que duele. El que duele menos o tinta con esperanza, (blanquiverde), el dolor en tu relato, por estar repintado de poesía.
Un saludo.
Mal de amores... duro es cuando duele, tanto si se tiene como si no...
Tu texto tiene una riqueza de imágenes, aromas y colores, que hasta se me ha olvidado cualquier dolor emocional que pueda padecer.
Besos!
Gaby*
Siempre es un placer leerte José Miguel. Tu texto está lleno de poesía y si cerramos los ojos podriamos ver todo lo que nos describes tan bien.
Ese mal de amores tiene su aquel
Un abrazo
El desamor es el dolor más fuerte que tenemos que enfrentar, aunque tu al convertirlo en poema, nos has regalado un jueves precioso.
Tienes un regalito en mi blog a tu nombre para tu blog, es mi manera de darte la sgracias por tu participación en este jueves.
Saludos y gracias amigo.
El amor no correspondido es uno de los dolores más profundos, trae desasosiego y soledades llenas de interrogantes. Todos creo hemos pasado por eso y es tan costoso poder superarlo.
Un abrazo.
mal de amores en el cual siempre nos sentimos perdidos...
mal de amores como conozco muy bien aquella sensación ese triste destino
José Miguel, poeta, tengo la suerte de poder disfrutar del color y la flor de esos patios cordobeses que mencionas. El dolor emocional se hace más tenue, más ligero, puede incluso desaparecer por momentos, envuelto en la magia de esos inigualables rincones.
Un gozo leerte, amigo.
Un abrazo.
José Miguel acabo de dejarte un regalo en mi blog, pasáte a recogerlo y luego nos cuentas.
Un besote.
Pues para tratarse de mal de amores nos lo has contado de una forma muy bella. Precioso. Un beso.
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